Ecografía POCUS para evaluar la colocación de la sonda
En este contexto, en medicina humana se ha investigado el uso de la ecografía en el punto de atención (POCUS) como herramienta para confirmar la posición de las sondas nasogástricas. La ecografía permite realizar una evaluación rápida, no invasiva, repetible y sin radiación, en el mismo lugar en el que se encuentre el paciente y en medicina humana se han realizado varios estudios para valorar la precisión de esta técnica para confirmar la colocación de las sondas de alimentación 6,7,8,9,10. En estos estudios se encontró que la ecografía POCUS tenía una sensibilidad del 92,8-100 % para detectar la sonda nasogástrica y la duración total del procedimiento era de 10 minutos 9. Se ha observado que al insuflar la sonda de alimentación (bien con solución salina 5-50 ml o con 5 ml de aire) se crea una imagen de niebla hiperecogénica en el estómago que mejora la sensibilidad para confirmar la correcta colocación de la sonda nasogástrica 9,10. Sin embargo, no se ha podido evaluar la especificidad debido al bajo número de sondas que, por error, se colocaron en el tracto respiratorio, por lo que todavía no está claro si esta técnica detecta la colocación incorrecta de las sondas nasogátricas.
En medicina veterinaria, la radiografía torácica lateral derecha sigue siendo el método de referencia para confirmar la posición de una sonda de alimentación. Sin embargo, para realizarla hay que trasladar al paciente, a menudo inestable, hasta el equipo de rayos X, conlleva la exposición a la radiación y el coste es importante. En un estudio inicial se encontró que la ecografía gástrica es un método fiable para confirmar la posición de la sonda orogástrica en cachorros y gatitos recién nacidos (con menos de 24 horas de vida) 11, pero hasta la fecha, solo se han realizado tres estudios para evaluar la viabilidad y fiabilidad de la ecografía POCUS para confirmar la posición de una sonda nasogástrica 12,13,14. En un estudio en 51 perros, cuyo estado no era crítico, se indicó que la ecografía del lado izquierdo del cuello con un transductor lineal tenía una excelente sensibilidad (95,6%) y una elevada especificidad (83,3%) para detectar la posición de la sonda en el esófago 12. En un segundo estudio en 25 gatos, cuyo estado no era crítico, se indicó que la sensibilidad de la ecografía del cuello para detectar la posición de una sonda de alimentación en el esófago era del 100% 13. Los autores del estudio también realizaron la ecografía con un transductor convexo para identificar el extremo de la sonda nasogástrica en el estómago y obtuvieron una sensibilidad del 100%, pero una especificidad de solo el 75% 13, y este resultado no mejoró al repetir la ecografía inyectando 5 ml de una mezcla de solución salina y aire. Dada esta especificidad, deberíamos ser cautelosos con respecto a este uso en el ámbito de la clínica. Por último, los resultados preliminares de un estudio reciente en 37 perros y 21 gatos hospitalizados en cuidados intensivos 14, han indicado que la ecografía del lado izquierdo del cuello tiene una excelente sensibilidad para detectar la posición esofágica de la sonda. Para confirmar la localización gástrica del extremo de la sonda nasogástrica, el mejor resultado se obtuvo cuando se insufló aire, obteniendo una sensibilidad del 68,2% y una especificidad del 73,3% 14. Con la ecografía POCUS se obtuvieron las imágenes más rápidamente que con la radiografía (6 minutos [rango 5-8] frente a 11 minutos [rango 5-15] (p=0,0008)). A continuación, en este artículo, se detalla cómo realizar la ecografía POCUS para detectar la colocación de una sonda de alimentación en el esófago y en el estómago.
Técnica
El animal se coloca en decúbito lateral derecho o esternal con el cuello extendido, pudiendo ser necesaria la ayuda del auxiliar veterinario para mantener la posición adecuada. La visualización se puede mejorar rasurando el pelo, pero normalmente esto no es necesario.
Ecografía esofágica
La ecografía del esófago se puede realizar con un transductor lineal (6-12MHz). Primero se realiza una vista transversal del lado izquierdo del cuello para identificar la tráquea, con la glándula tiroides caudalmente (Figura 1). La tráquea se visualiza como una estructura curva con una línea hiperecogénica por la interfase tejido/gas, asociada a artefactos de reverberación. Se puede identificar la vena yugular, la vena tiroidea, los músculos tiroideos y la glándula tiroides, la arteria carótida, la vena yugular interna y el tronco vagosimpático (Figura 2). El esófago cervical se visualiza como una estructura oval a la izquierda de la tráquea, en esta vista, y se deberían identificar las cinco capas de la pared esofágica: adventicia hiperecogénica, muscular hipoecogénica, submucosa hiperecogénica, mucosa hipoecogénica y superficie mucosa hiperecogénica 15.